martes, 28 de abril de 2015

Los girasoles ciegos: Entrevista a Alberto Méndez



  Para el alumnado de 2º de Bachillerato: a continuación os dejo un interesante enlace en el que podréis conocer un poco más a fondo al autor de la obra Los girasoles ciegos, ya que recoge una de las pocas entrevistas que se le hicieron sobre la obra.



lunes, 6 de abril de 2015

Comentario crítico: "Retrato", de Antonio Machado

RETRATO, Antonio Machado

Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla,
y un huerto claro donde madura el limonero;
mi juventud, veinte años en tierras de Castilla;
mi historia, algunos casos que recordar no quiero.

Ni un seductor Mañara, ni un Bradomín he sido
—ya conocéis mi torpe aliño indumentario—,
más recibí la flecha que me asignó Cupido,
y amé cuanto ellas puedan tener de hospitalario.

Hay en mis venas gotas de sangre jacobina,
pero mi verso brota de manantial sereno;
y, más que un hombre al uso que sabe su doctrina,
soy, en el buen sentido de la palabra, bueno.

Adoro la hermosura, y en la moderna estética
corté las viejas rosas del huerto de Ronsard;
mas no amo los afeites de la actual cosmética,
ni soy un ave de esas del nuevo gay-trinar.

Desdeño las romanzas de los tenores huecos
y el coro de los grillos que cantan a la luna.
A distinguir me paro las voces de los ecos,
y escucho solamente, entre las voces, una.

¿Soy clásico o romántico? No sé. Dejar quisiera
mi verso, como deja el capitán su espada:
famosa por la mano viril que la blandiera,
no por el docto oficio del forjador preciada.

Converso con el hombre que siempre va conmigo
—quien habla solo espera hablar a Dios un día—;
mi soliloquio es plática con ese buen amigo
que me enseñó el secreto de la filantropía.

Y al cabo, nada os debo; debéisme cuanto he escrito.
A mi trabajo acudo, con mi dinero pago
el traje que me cubre y la mansión que habito,
el pan que me alimenta y el lecho en donde yago.

Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar,
me encontraréis a bordo ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar.


         Comentario crítico del poema “Retrato” de Antonio Machado, realizado por la alumna de 2º de Bachillerato C, Mariana Cabello Colmenares, a la que agradecemos poder compartirlo:

         En este poema Antonio Machado transmite la visión que tiene su vida desde sus inicios hasta casi el final de esta. Reflexiona a partir de sus recuerdos sobre él mismo y conduce al lector a través de un tranquilo recorrido hasta la despedida, que más que ser triste resulta pacífica.
         Al contrario que la mayoría, en este poema de Machado no  expresa ningún tipo de angustia por el paso del tiempo o la muerte, simplemente asume sus recuerdos y los agradece. Esta postura es contraria a la mayoría de las personas, a las que les causa una angustia terrible percatarse de que el tiempo transcurre de forma incontrolable, lo que las hace sentir insignificantes.
         Es este sentimiento lo que causa crisis emocionales a edades determinadas, en un anciano que se percata de que es un anciano o un adulto que se da cuenta de que ya no es un niño, y esto ocurre por el deseo de querer aferrarse indefinidamente a un momento.
         Del paso irremediable del tiempo surge también el miedo a  la muerte, algo que comparten todos los seres vivos de manera instintiva, pero que en este caso -en el de las personas- se experimenta casi de forma permanente, y se empieza a buscar formas de contrarrestar el cambio constante de las cosas.
         Aparecen así cada vez más tratamientos médicos, terapias, dietas y procedimientos que alargan cada vez más la vida de las personas y mejoran las condiciones en las que viven, e incluso hay cada vez más opciones para mantener una apariencia joven por más tiempo, todo ello buscando alcanzar el deseo de inmortalidad y de permanecer inmutables al tiempo.

         Sin embargo, tal como manifiesta Machado, cada etapa de la vida tiene su belleza y nos lleva a etapas distintas que forman lo que somos. Si todo permaneciera inmutable, el mundo se quedaría atrapado en un círculo monótono y eterno, pero es el cambio lo que lleva a las personas a descubrir nuevas emociones y experiencias.